Ingredientes:
50 mililitros de leche
50 mililitros de anís
50 mililitros de aceite de oliva
Medio sobre de levadura en polvo
2 huevos
Aceite de girasol (para freír)
Una buñolera
Modo de hacerlo:
Mezclar en un bol la leche, el anís,
el aceite, el azúcar y los huevos.
Iremos añadiendo (y mezclando al
mismo tiempo) la harina tamizada junto con la levadura.
Dejamos reposar y, mientras
tanto, ponemos a calentar un recipiente con el aceite. Introducimos la buñolera
(hay que tener en cuenta que cuando le añadamos la masa la buñolera ha de estar
muy caliente).
Una vez caliente el aceite
sacamos la buñolera del mismo, la rellenamos con masa por la mitad y la
introducimos de nuevo en el aceite.
Vamos friendo las rosquillas.
Cuando estén hechas se van
sacando y colocando sobre papel absorbente.
Las rebozamos con azúcar.
Hay que tener muy en cuenta que
mientras se frían las rosquillas la buñolera deberá permanecer en el interior
del aceite, con el fin de que siempre esté muy caliente.
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